El laboratorio
Los sistemas eléctricos de un automóvil deben pasar un conjunto de pruebas para certificar su validez y demostrar que cumplirán con todos los requisitos de funcionalidad y de seguridad.
Los componentes eléctricos y electrónicos de un automóvil deben soportar el ciclo de vida del vehículo manteniendo sus requisitos de funcionalidad, seguridad y satisfacción de usuario.
Para demostrar la fiabilidad de los componentes, estos son sometidos a una serie de ensayos físicos donde se simulan las cargas mecánicas, climáticas, eléctricas o químicas que el componente tendrá que soportar durante su uso en función de su ubicación dentro del vehículo.
CTAG se encarga de la ejecución de estas pruebas físicas, la simulación del entorno del componente (comunicaciones, cargas vinculadas, fijaciones…) y la redacción del plan de ensayos particular.